domingo, 23 de septiembre de 2012

La Duquesa de Alba (III y última parte).


    Mecenazgo y rivalidades.



    Cayetana es mayormente conocida como una de las primeras mecenas del pintor español Francisco de Goya. Fue la más controvertida mujer de su época, debido a su hermosura, sensualidad y vida liberal.

    Se le atribuye un romance con Goya, quien la retrató en varios de sus cuadros y hubo de sentirse desengañado por su carácter caprichoso. Otras fuentes niegan cualquier posibilidad de relación entre ellos, por la desigualdad social que les separaba. Algunas teorías apuntan que posó para el cuadro La maja desnuda, aunque otras fuentes dicen que la modelo era Pepita Tudó, amante de Manuel Godoy y luego su segunda esposa. Esta hipótesis es más creíble ya que fue Godoy quien hubo de encargar la pintura (fue su primer propietario conocido) y por otro lado, el aspecto de la duquesa (conocido por varios retratos) difiere de la maja, de estatura más baja y formas más redondeadas.

    Los datos reales y los novelescos se entremezclan en la biografía de la duquesa. Se dice que sentía atracción por toreros y demás hombres de condición social inferior, y que incluso salía por las noches, vestida de maja, para disfrutar de diversiones vedadas a las damas respetables. Su carácter imprevisible contribuyó a este mito: era cariñosa con niños y pobres, pero al mismo tiempo tenía veleidades caprichosas, de derroche y ostentación, y se cuenta que mantenía rivalidades frívolas con otras damas destacadas de Madrid, como la duquesa de Osuna, María Josefa Pimentel, vizcondesa de Bearne, María Ana de Abad y la reina María Luisa de Parma. Se cuenta que la duquesa y la reina competían por sorprender en atuendo y lujos, para lo que importaban vestidos exclusivos de París. En una ocasión, dicen que la duquesa plagió un diseño pensado para la reina, y vistió con la misma ropa a sus criadas, con el único propósito de ridiculizarla. La enemistad entre ellas se atribuye a su lucha por acaparar la atención de Manuel Godoy, que ascendió como político con la protección de la reina pero que también tuvo presuntas relaciones con la duquesa, que era ya viuda

    Fallecimiento.

    Cayetana murió repentinamente en 1802, a los 40 años, supuestamente víctima de una fiebre, aunque se rumoreaba que fue asesinada por Manuel Godoy siguiendo las instrucciones de la reina María Luisa de Parma. Tras su muerte, Godoy llevó a cabo la expropiación de varios de sus propiedades, cuadros y joyas. Así, un gran número de sus famosos cuadros pasaron a sus manos, como la Venus del espejo de Velázquez y La educación de Cupido de Correggio (ambos ahora en la National Gallery de Londres), y el Palacio de Buenavista dejó de ser residencia de los Alba.

    Su último testamento, conservado en el Archivo Ducal de la Casa de Alba, instituía como herederos universales de sus bienes libres a su hermanastro y primo, Carlos Pignatelli de Aragón y Gonzaga, a su niña adoptada, María de la Luz, al hijo del pintor Goya, Javier de Goya y Bayeu y a buena parte de sus criados y sirvientes. Por otro lado, los bienes y títulos que conformaban la Casa de Alba recayeron entonces en la Casa de Liria y Jérica, aunque con alguna excepción, ya que la Casa de Oropesa quedó incorporada en la Ducado de Uceda, en la figura de Andrés Manuel Alonso Pacheco Téllez-Girón y Toledo, XV Conde de Oropesa, VII Duque de Uceda y VII Marqués de Belmonte.

    Exhumaciones.

    El 17 de noviembre de 1842, con motivo del traslado sus restos mortales desde su sepultura original en la capilla de los Alba en la Iglesia del Salvador y San Nicolás al cementerio de la Sacramental de San Isidro, se descubrió que el cuerpo de Cayetana había sido parcialmente mutilado: tenía las piernas serradas y le faltaba un pie. Al parecer, al ser colocada en el ataúd, su altura impedía la correcta postura y tuvieron que serrarle los pies para que cupiese en el féretro. Ya en 1945, el cadáver de la duquesa fue exhumado por segunda vez y sus restos sometidos a autopsia. Su muerte fue atribuida a una meningoencefalitis de origen tuberculoso, lo que descartaba el presunto envenenamiento.

Fuentes: Wikipedia.

No hay comentarios:

Publicar un comentario